En un mensaje transmitido por cadena nacional, el presidente Javier Milei confirmó este viernes la eliminación total del cepo cambiario, medida que, según definió, marca el inicio de una “nueva era de libertad y estabilidad” en la economía argentina. El anuncio se da en el marco de la aprobación de un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que contempla un préstamo por US$32.000 millones, destinado a respaldar la base monetaria del país.

“Se rompió el último eslabón de la cadena económica, eliminamos el cepo para siempre”, expresó Milei con tono enfático, al tiempo que calificó al cepo como “una aberración que nunca deberíamos haber tenido”. Según detalló, esta medida fue posible gracias al ordenamiento de las cuentas públicas, que, en sus palabras, se logró “en tiempo récord”.

El jefe de Estado remarcó que la administración actual ha conseguido dejar atrás el desequilibrio fiscal que caracterizó a gestiones anteriores. “Pasamos de ser el peor alumno a un alumno ejemplar que sólo gasta lo que entra y ni un peso más”, afirmó.

Durante su alocución, el mandatario destacó el impacto nocivo del cepo sobre la economía real: “Generaba distorsiones que destruyeron el ahorro y la inversión. Hoy, eso se terminó”. Además, anticipó que con el nuevo respaldo financiero y el esquema monetario que su gobierno impulsa, Argentina podrá avanzar hacia “una economía sólida, previsible y con reglas claras”.

El acuerdo con el Fondo Monetario Internacional no solo refuerza las reservas del Banco Central, sino que también avala el programa de estabilización fiscal y monetaria que el Gobierno promueve desde su asunción. Según fuentes oficiales, los fondos estarán destinados a garantizar la cobertura de los pesos existentes en circulación, lo que refuerza el compromiso de evitar la emisión descontrolada.

“Hoy comienza una nueva etapa. Una etapa sin atajos, sin populismo, sin trampas. Una etapa donde el esfuerzo será recompensado y la estabilidad no será una promesa, sino una realidad concreta”, concluyó Milei.

Con este anuncio, el Gobierno busca consolidar su rumbo económico liberal, eliminar las restricciones que durante años condicionaron al mercado de cambios y, al mismo tiempo, enviar un mensaje claro a los inversores: la Argentina apuesta por la estabilidad y la libertad económica como pilares de su futuro.